Llega final de temporada y toca pensar en la siguiente. Tras darse ciertas circunstancias, entre Pau y nosotros hemos decidido cambiar de club. Es algo que hace unas semanas ni pensábamos, pero creemos que será algo positivo para nuestro hijo.
Ha sido una decisión agridulce. Es triste tener que dejar el Cambrils Unió, el club en que Pau lleva desde los 3 años, con un paréntesis de 2 temporadas que estuvo en el Reus Deportiu. Un club dónde nos hemos sentido muy a gusto como familia y hemos conocido a grandes personas. Por otro lado este cambio abre la puerta a una nueva etapa y a la ilusión de empezar un nuevo proyecto en un nuevo club con nuevos compañeros. Es una decisión que estuvimos a punto de tomar la temporada pasada pero que finalmente no hicimos. A toro pasado es fácil pensar que tal vez el cambio tendría que haber llegado antes, pero como dice el dicho "a lo hecho, pecho".
Pau en sus primeros años en el Cambrils UCF |
¿Y porqué cambiar? Es simple. Cuando el responsable de porteros te dice abiertamente que no confía en tu hijo te das cuenta que esa persona no es la ideal para entrenarlo. Es cierto que Pau por el problema del tendón rotuliano secundario al crecimiento ha estado parado unos cuantos meses, pero cuando ha podido jugar yo lo he visto a muy buen nivel, cosa que no comparte el técnico. Como siempre digo, yo no entiendo mucho de fútbol, así que no voy a discutir un tema en el que tengo una visión subjetiva. Más allá de que Pau haya podido estar mejor o peor, lo más triste es que personas que hace 4 años no le paraban de elogiar, ahora no quieran saber nada de él. Pero me parece que el mundo del fútbol es así. Y pienso, y siempre lo digo, que ni Pau era tan bueno antes, ni tan malo después.
Me considero una persona de paz y no me gusta el conflicto. Por ello acepto la opinión del coordinador de porteros, al final él es el que entiende y debe ser el responsable de decidir lo mejor para su club. Puede ser que no comparta su punto de vista. Podría ser que tuviera la razón. Podría pensar que a parte de lo deportivo hay otras causas para la pérdida de confianza. Muchas cosas podrían ser y no serlas a la vez. Pero la realidad es que si en un sitio no te quieren es mejor cambiar, quedándose con las cosas buenas de la anterior etapa y usando las malas para aprender. Y estaos seguros que de todo lo malo siempre sale algo bueno.
Por delante tenemos la última temporada de fútbol 7 previa al paso a fútbol 11. Este año ha sido duro para Pau por el tema lesiones y este final inesperado, al menos para nosotros. En algún momento se ha llegado a plantear hasta dejarlo. Finalmente pudo volver la última semana y hacer un gran torneo de final de temporada.
Yo como padre sólo quiero que mi hijo disfrute jugando al fútbol, que se sienta parte importante del equipo y que sea feliz. Es así de simple. Y nuestras decisiones van orientadas en este sentido. Pau es un muy buen estudiante y espero algún día verlo graduado en alguna universidad. El tema del fútbol no va a ser su oficio, eso lo tenemos claro. Pero no hace faltar tener esa meta para poder disfrutarlo en cada entrenamiento y en cada partido. Y el cambio que hará sólo tiene ese objetivo, volver a disfrutar en un club en que lo valoren.
Mucho ánimo para Pau y para vosotros
ResponderEliminarQue le vaya muy bien ese cambio de equipo.
Muchas gracias
EliminarLo mejor es que Pau disfrute y se divierta con el fútbol este donde esté y que crean en el...es lo más importante que crean en el y le den co fianza suerte y a por el toro ...
ResponderEliminarTotalmente de acuerdo con la importancia de la confianza. Gracias por el comentario
EliminarComo muy bien has dicho, el tema del fútbol es así tristemente, pasan del elogio a la desconfianza y cuando un club o un entrenador no confía en un jugador mejor cambiar.
ResponderEliminarEste verano nuestro hijo también portero prebenjamin hizo un amiguito portero alevin, y éste le daba consejos y uno de ellos fue que para mejorar era muy importante caerle bien al entrenador..
Esto me hizo reflexionar en muchas cosas y sobre todo en que siempre tendríamos como prioridad que nuestro hijo disfrutara y fuera valorado en el equipo donde estuviera.
Los cambios siempre aportan cosas buenas y son necesarios para evolucionar.
A Pau le va a ir fenomemal, así que a por ello sin dudarlo.